El bambú es sostenible

La durabilidad es sin duda la característica más importante del Bambu. De hecho, el bambu es la planta de más rápido crecimiento en el planeta. Esto, junto con la evitación de procesos artificiales, hace producción de toallas de bambu altamente sostenible. Como ventaja añadida, la planta de bambú no necesita ser replantada porque brotan nuevos brotes de los viejos. Es bueno para usted y es aún mejor para el medio ambiente.

El bambú contrarresta los hongos

Sin embargo, uno puede preguntarse por qué el bambu funciona tan bien en los textiles. La respuesta se puede encontrar en fibras minúsculas. Las fibras de la planta de bambú tienen cualidades antibacterianas, lo que significa que evitan que crezcan hongos dentro de la tela. Esto le permite usar su toalla de bambú durante varios días sin tener que lavarla con tanta frecuencia como las toallas normales. Es una situación en la que todos ganan, tanto para usted como para el medio ambiente.

Las toallas de bambú se secan más rápido

Pero los beneficios del bambú no terminan ahí. El bambú, en particular, es superior al algodón en términos de absorción de humedad. No tienes que preocuparte de que una toalla de bambú huela fatal después de unas horas porque se seca muy rápido.

Más suaves que las toallas regulares.

Otra característica atractiva del bambú es lo suave y tierno que se vuelve cuando se usa en
textiles. La celulosa del bambú tiene una superficie lisa que permite que el aire viaje fácilmente a través y adentro. En pocas palabras, es un puro placer para tu piel. Por su suavidad, es adecuado para tejer en diferentes tipos de telas, como ropa de niños o ropa de cama. Para hacer para que sean lo más suaves posible, muchas toallas de bambú ecológico se crean a partir de una combinación de bambú y algodón.

Amigable con la piel y las alergias

Si tú, como tantos otros en nuestro frío país, tienes la piel sensible, nuestras Almohadillas de Bambú son una sabia elección. Debido al hecho de que son naturalmente suaves, no es necesario frotar la piel con tanta fuerza, algo que tiende a crear irritación y a la larga seca la piel. Si también eres sensible al material sintético, no tienes que preocuparte por el bambú.